Fue un viaje improvisado en coche, tuvimos un tiempo excepcional y nos dio para visitar el entorno del cabo de San Vicente y sobre todo las playas que van desde el cabo hacia el norte en la costa atlántica de Portugal.
En esa zona, la carretera transcurre a unos cientos de metros de la costa y hay (o había, que no he vuelto) que adentrarse por carreteras de tierra para descubrir las playas, en general bastante vacías, sobre todo en comparación con las playas más urbanizadas del sur del Algarve.